

CULTURAL HISTORY
En los siglos XIX y XX, los estrechos vínculos entre Chile y Gran Bretaña moldearon el desarrollo de ambos países. Los marineros, comerciantes, ingenieros, maestros y muchos otros británicos ayudaron a Chile y otras naciones sudamericanas a obtener la independencia, a establecer rutas comerciales, construir vías férreas y canales, a excavar minas, además de hacer parte del cuerpo docente de sus escuelas; de igual forma, los nitratos, el cobre, el carbón, el guano y otras materias primas chilenas fueron esenciales para la Revolución Industrial en Gran Bretaña.
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Como puerto comercial líder a lo largo de la costa del Pacífico antes del desarrollo del Canal de Panamá, Valparaíso jugó un papel central en estos procesos y en la historia de la globalización en general. De hecho, La UNESCO declaró a Valparaíso Patrimonio de la Humanidad en 2003, calificando a la ciudad portuaria como "un testimonio excepcional de la fase inicial de la globalización a fines del siglo XIX, cuando se convirtió en el principal puerto comercial en las rutas marítimas de la costa del Pacífico de América del Sur".
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El poeta Domingo Faustino Sarmiento describió a Valparaíso como “una Europa recién desembarcada desparramada en la playa / cuya savia ha saturado formas de ser visibles e invisibles”. Como implica la metáfora de Sarmiento, las costumbres y formas de vida chilenas se vieron profundamente afectadas por la influencia británica y estadounidense, particularmente en el puerto de Valparaíso, donde estos inmigrantes desembarcaron por primera vez trayendo consigo conocimientos, ideas y costumbres del exterior.
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A medida que se adaptaban a su nuevo paisaje y cultura, los inmigrantes británicos y estadounidenses buscaban recrear tradiciones culturales que les recordaban a su hogar, como los partidos de fútbol que jugaban los marineros británicos en los cerros de Valparaíso o la tradición de la hora del té de las cinco de la tarde, llamadas "las onces" o elevenses. Ambos, y muchos otros, todavía dan forma a la cultura chilena en la actualidad.
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A medida que la población de la colonia creció, los británicos ejercieron una influencia cada vez mayor, fundaron instituciones educativas, periódicos, clubes deportivos y organizaciones sociales y culturales mientras desempeñaban un papel enorme en la contribución al arte, la arquitectura, la cultura naval y más de la nueva nación.
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En las secciones a continuación (y también vinculadas en el menú de navegación de arriba), lo invitamos a explorar algunos de los hitos de la historia cultural anglo-chilena, desde su legado marítimo y colonial hasta las tradiciones que se han incorporado en el tejido del patrimonio anglosajón en Chile.